La Cátedra de Agricultura Sostenible y agricultores del campo de Cartagena coinciden en que la recuperación de la actividad agrícola del campo de Cartagena y el Mar Menor pasa por la investigación y la tecnología. Ese es el fin primordial por el que se constituyó esta organización con “gran vocación medioambiental”, tal y como ha afirmado su director, Juan José Martínez.
“Los agricultores, ante este problema, están poniendo todas las soluciones que están en su mano, pero necesitan ayuda técnica y es por ese motivo por el que se puso en marcha la Cátedra”, ha destacado Juan José Martínez. Asimismo, el director de la Cátedra ha puesto de manifiesto que es cometido de todos poner las soluciones pertinentes, recordando el papel fundamental que juega la actividad docente formando a esos profesionales que asesoran a los agricultores en el desarrollo de su actividad.
Otro de los objetivos prioritarios de la Cátedra es llevar a cabo un proyecto de desnitrificación que consiga eliminar los nitratos de la salmuera, pero se encuentran con una traba. “El problema es que no disponemos de salmuera para poder investigar debido al cierre de las desalobradoras en 2016, una de ellas la de la finca de Tomás Ferro, una desalobradora que está conectada a un pozo autorizado”, ha destacado el director de la Cátedra.
Científicos y administraciones coinciden en que una posible solución para paliar la carga de nitratos del acuífero sería bombear ese agua para reducir el nivel freático del mismo con el objetivo de impedir la entrada de nitratos al Mar Menor, llevando a cabo una desnitrificación en origen de un 95% de nitratos.
“Cuando bombeamos el agua del pozo es un agua salobre que no se puede utilizar para regadíos, por lo que es necesaria su desalobración. Las desalobradoras obtienen un rechazo de salmuera en torno al 25% del agua que se saca y el 75% está destinada a regadío. Poniendo en práctica estas investigaciones, conseguiríamos reducir la cantidad de salmuera a un 5% de rechazo”, ha manifestado Juan José Martínez.
Desde hace años, el reclamo de los agricultores ha sido garantizar que la calidad de las aguas que se vertían al mar fueran de una calidad aceptable. Es por este motivo por el que la Cátedra ha solicitado a la CHS la apertura de la planta desalobradora para fines experimentales en La Finca Tomás Ferro (Cartagena).
Cátedra y agricultores lamentan los retrasos y trabas que han sufrido para esta autorización por parte de la CHS, a pesar de haber obtenido 7 informes favorables de los organismos de administración regional y nacional. Sin embargo aplauden los últimos pasos que se han dado esta última semana y “parece que la autorización está cada vez más cerca”, ha destacado Miguel Padilla, presidente del sindicato agrario COAG.
Asimismo, Miguel Padilla ha resaltado los esfuerzos considerables que están realizando los agricultores para paliar la problemática del campo de Cartagena y del Mar Menor, y ha animado a otros sectores a realizar este mismo esfuerzo. “Queremos soluciones y estas soluciones vendrían de la mano de las autorizaciones que estamos esperando de la CHS para proceder a la apertura de esa planta desalobradora”, ha afirmado el presidente de COAG.
Por su parte, Santiago Martínez, presidente de FECOAM, ha destacado que el campo de Cartagena genera cerca de 25.000 puestos de trabajo, mantiene a muchas familias de la Región y da estabilidad a la economía regional. “Estamos siendo un sector sostenible que ha sacado a la Región de muchos problemas y nos merecemos que la sociedad tenga acceso a la información sobre las actuaciones que estamos llevando a cabo”, ha concluido Santiago Martínez.
Vídeo de la rueda de prensa celebrada el 8 de septiembre de 2017 en COAG-IR Murcia